Un compresor es un efecto que se utiliza para estrechar el rango dinámico (la diferencia de volumen entre los sonidos más altos y los más bajos) comprimiendo el sonido.

Los tres parámetros principales de un compresor son: "threshold" o umbral (el volumen al que entra en funcionamiento la compresión), "ratio" o relación (la proporción de compresión) y "output gain" o ganancia de salida (aumento de volumen).

El umbral (threshold) determina el volumen objetivo: cualquier sonido que lo supere se verá reducido de volumen de acuerdo a la proporción establecida por el parámetro de relación (ratio). El volumen final se puede ajustar según sea necesario con la ganancia de salida (output gain).

Comprimir los sonidos más altos para reducir la diferencia de volumen entre los sonidos más altos y los más bajos puede hacer que la música sea más fácil de mezclar y se escuche mejor.

Cuando se toca un instrumento o se canta no siempre se mantiene el mismo volumen. Ajustar el volumen para que la audiencia pueda escuchar cómodamente es algo importante en la mezcla.

Con la utilización de un compresor en su justa medida para las voces, que tienen un amplio rango dinámico, el sonido no se sobrecargará incluso aunque el vocalista o los coros canten en determinados momentos a todo pulmón, posibilitando así que las voces se combinen al volumen apropiado. Utilizado para el bajo puede hacer que el sonido de este instrumento se escuche limpio y uniforme, contribuyendo también a la cohesión de la mezcla. El uso de un compresor en la caja de la batería o en otros instrumentos con un ataque pronunciado puede dotar de mayor impacto al sonido.

Puesto que el compresor reduce los sonidos más altos, puede ser de gran utilidad para proteger al equipo de picos de volumen extremos y repentinos.

Los ingenieros experimentados pueden utilizar compresores para revitalizar pistas y hacerlas sonar más atractivas añadiendo viveza a las partes de guitarra, pegada a las líneas de bajo, compactando el sonido de la caja de la batería o consiguiendo que las voces suenen más claras. Pero por el contrario, si los compresores no se utilizan correctamente, el sonido puede perder su fuerza dinámica.

Los compresores de mando único de Yamaha tienen un solo mando para expresar esa clase de control que logran los ingenieros experimentados. Estos compresores de mando único te permiten conseguir el efecto de compresión óptimo tanto para voces como para instrumentos, haciendo que tu música suene auténtica sin necesidad de tener que recordar complicados nombres de funciones ni principios de funcionamiento, y sin necesidad también de depender de ningún otro dispositivo de compresión externo.

Cuando se utiliza una mesa de mezclas MG20XU o similar de Yamaha (que tenga integrados varios compresores de mando único), es recomendable usar la función de compresión de mando único para mezclar música en directo.