El MTX3 de Yamaha resuelve el dilema de división de Lifespring

Las iglesias y recintos de culto pueden ser espacios difíciles para instalar sistemas de sonorización, especialmente si se tratan de edificios históricos. En Reading (Reino Unido), se presentó un nuevo reto cuando la iglesia Lifespring quiso añadir un espacio extra a su sede en un cine reconvertido, con la idea de que pudiese también combinarse con el espacio principal a conveniencia. Gracias al procesador de matriz MTX3 de Yamaha, se consiguió una solución elegante.

Construido en los años 20 del siglo pasado, el edificio "The Pavillion" fue originalmente el primer cine público de Reading. Convertido posteriormente en salones de billar, la iglesia Lifespring lo restauró en 2013 con una disposición parecida a la original. Ahora es la sede permanente de la iglesia Lifespring, con servicios religiosos semanales, eventos para jóvenes, reuniones y otras actividades.

Durante los tres primeros años de la "nueva" vida del edificio, Lifespring utilizó el antiguo auditorio como su espacio principal, pero el año pasado añadieron una extensión sobre la terraza para proporcionar una capacidad extra, y así tener la opción de utilizar dos espacios separados o uno grande. Enseguida surgió el problema de cómo gestionar el sistema de sonorización.

El grupo SFL, con base en Reading, tiene muchos años de experiencia en proyectos de iglesias y recintos de culto. La compañía había proporcionado el sistema de audio a Lifespring en 2013, y añadió más equipo para la zona de terraza en 2016. Como parte de esta nueva instalación, se pidió a SFL que resolvieran el problema de dividir o combinar el sistema de sonorización según se utilizase el nuevo recinto de una forma u otra.

"Para separar los dos espacios hay un panel corredero que abarca toda la longitud del frontal de la terraza", dice Pat Smith, el ingeniero de SFL encargado del proyecto. "Lifespring necesitaba una forma de distribuir audio a través de los dos sistemas que permitiese una fácil selección entre dos configuraciones: dos recintos divididos o un recinto combinado.

La solución fue el MTX3 de Yamaha, a través del cual se enrutaron todas las señales de audio. Cuando el espacio está dividido, cada "mitad" del sistema de audio opera independientemente, incluidos los envíos desde mesas de mezclas separadas y otras fuentes. En la configuración combinada, la mesa del auditorio principal es la que se utiliza para la mezcla del sistema entero.

Los usuarios necesitan poder seleccionar rápida y fácilmente una u otra configuración, por lo que en ambas posiciones de mezcla se incluyó un panel de control DCP4S de Yamaha. Basta con tocar un botón en cualquiera de los paneles y el MTX3 aplica los enrutamientos de señales, niveles de salida y retardos de cada canal de audio que se hayan predefinido, cambiando instantáneamente el sistema de "dividido" a "combinado", y viceversa.

En el modo combinado, el MTX3 también gestiona los niveles y retardos adicionales necesarios para la zona de extensión, alineando y equilibrando las dos mitades del sistema de audio.